ICSI, una técnica de fecundación in vitro

¿Estáis evaluando someteros a una FIV? ¿El médico os ha recomendado una ICSI pero no sabéis bien qué es? En Menudos Bebés queremos acompañaros en la búsqueda de vuestro deseado hijo, por eso hoy hablaremos sobre la fecundación in vitro, específicamente mediante la técnica ICSI Inyección Intracitoplasmática de Espermatozoides.

¿Queréis saber por qué os recomiendan esta técnica? ¿Cómo se realiza y cuáles son las tasas de éxito? Entonces no podéis perderos este post. Aprendamos juntos sobre la ICSI

¿Qué es la ICSI?

La ICSI es una técnica de fertilización dirigida, que implica inyectar un espermatozoide en el óvulo con una aguja. Se lleva a cabo durante un procedimiento de fecundación in vitro o FIV en casos donde el médico considera necesaria la intervención para lograr la fertilización del óvulo.

Durante una FIV, el médico optará por realizar una inyección intracitoplasmática de espermatozoides o una fecundación in vitro convencional que consiste en colocar un óvulo en una placa de Petri con los espermatozoides y esperar la unión.

Seguramente os estéis preguntando por qué el especialista os ha recomendado una ICSI en lugar de una fecundación in vitro convencional. Veamos juntos las posibles causas de esta elección…

Causas de la elección de la técnica ICSI

Una ICSI puede ser indicada tanto por factores femeninos como por factores masculinos. Es muy probable que si habéis probado ya tratamientos más sencillos, como la inseminación artificial, el médico os recomiende esta técnica. Pero veamos otros motivos…

La fecundación asistida suele ser la mejor elección cuando las causas que impiden el embarazo son la edad avanzada de la mujer, ausencia o lesión en las Trompas de Falopio, endometriosis avanzada, baja calidad de óvulos o poca cantidad de ovocitos y en casos de problemas masculinos severos como un bajo conteo de espermatozoides o una obstrucción.

Muchos centros prefieren realizar la ICSI frente a una FIV convencional para así asegurar la fecundación. Pero más allá de este motivo, particularmente la ICSI se indica en aquellas parejas donde la mujer padece lesiones en las Trompas de Falopio (o ausencia de ellas) o endometriosis moderada o severa o en caso de subfertilidad masculina, teratozoospermia (alteración seminal donde existe un alto número de espermatozoides con formas anormales) o con azoospermia (alteración donde el recuento de espermatozoides en el eyaculado es nulo).

Si alguno de estos es vuestro caso, no lo dudéis: la ICSI es vuestra mejor oportunidad para hacer realidad vuestro sueño.

Procedimiento de la técnica ICSI

ICSI: inyección citoplasmática de espermatozoides

La ICSI es una parte de la Fecundación in vitro, por lo tanto el procedimiento es prácticamente el mismo:

  • Estudio médico: el especialista analiza las enfermedades hereditarias y condiciones de cada miembro de la pareja (conteo de espermatozoides, cantidad de folículos de la mujer…),determinando las causas de la infertilidad y llegando a la conclusión de que la mejor opción de lograr el embarazo es la inyección intracitoplasmática de espermatozoides.
  • Estimulación ovárica: se administra una serie de medicamentos a la mujer para evitar la ovulación y posteriormente, estimular la producción de óvulos. El objetivo es que los ovarios produzcan varios óvulos en lugar de un óvulo por mes, como es habitual. Se realiza un monitoreo de la actividad ovárica para optimizar el ciclo y obtener un buen número de ovocitos.
  • Punción folicular: este procedimiento ambulatorio consiste en retirar los óvulos mediante una aguja delgada a través de la vagina. Esta aguja funciona conectada a un dispositivo de succión que extrae óvulos y líquido. En el caso de mujeres que no produzcan óvulos, es posible utilizar óvulos donados.
  • Recolección de semen: se recolecta el semen para la inseminación. En caso de que existan problemáticas masculinas que llevaron a la elección de la FIV como técnica de reproducción asistida, se puede utilizar semen de donante.
  • Fecundación mediante ICSI: en el laboratorio, el especialista inyectará un espermatozoide previamente escogido por su movilidad y fortaleza en el óvulo con una aguja.
  • El embrión: el óvulo fecundado se dividirá convirtiéndose en embrión. En aproximadamente 3 o 5 días, estará listo para la transferencia.
  • Transferencia del embrión: se coloca el embrión en el vientre materno. Este procedimiento se hace en el consultorio médico mediante la introducción de un catéter dentro de la vagina y hasta el interior del útero. Por lo general se transfieren 2 embriones (en España se pueden implantar un máximo de 3).

ICSI, tasas de éxito

La tasa de éxito media según datos de la Sociedad Española de Fertilidad se encuentra entre el 29 y el 35%, pero puede variar dependiendo de las condiciones propias de cada pareja:

  • la edad de la mujer es un condicionante del éxito, teniéndose buenos resultados hasta los 39 años (con tasas algo inferiores después de los 35).
  • el exceso de peso afecta la tasa de fertilización y embarazo.
  • una mujer que ha sufrido un aborto luego de una FIV tiene mayores posibilidades de quedar embarazada en un segundo intento.
  • el consumo de tabaco y alcohol por parte de la pareja puede influir en la tasa de éxito de la ICSI.
  • el estrés y el exceso de cafeína también son condicionantes y pueden influir negativamente en la consecución del embarazo.

Si estáis pensando iniciar un procedimiento de fecundación in vitro con ICSI, evitad el consumo de alcohol y tabaco, intentad manteneros relajados (una consulta psicológica puede ayudaros en este punto) y diminuid el consumo de café y bebidas colas. ¡Mucha suerte!

Más información: Sociedad Española de Fertilidad

Imagen: Tahe Fertilidad

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