A nadie le gusta hablar de pediculosis, ¿verdad? Pero ¡hay que hacerlo! No hay colegio donde no aparezcan y lamentablemente, cualquiera de nuestros hijos (e incluso nosostros mismos) puede pillarlos… ¿Conoces los 3 mitos más extendidos sobre los piojos? Hoy desenmascaramos algunas cosas que todos creemos que son verdad y ¡son simple mitología!
Piojos: ¿verdad o mentira?
1.» A los piojos les gustan los cabellos sucios». MENTIRA
Pillar piojos no tiene nada que ver con la higiene personal. Un niño que tiene pediculosis no la ha pillado porque no lave su cabello o no se bañe. De hecho, ¿sabías que estos insectos prefieren los cabellos limpios para vivir y reproducirse?
Con esto no queremos decirte que no laves el cabello de tus hijos, ¡claro que no! Sólo queremos derribar un mito que, nos incluímos, muchos de nosotros creíamos a pies juntillas. Dejemos de lado esta creencia y si nuestros hijos pillan estos antipáticos insectos, hablémoslo abiertamente para así evitar el contagio.
¿Un consejo? Cuando laves el cabello de tus peques, coloca un par de gotas de aceite de árbol de té en su champú, ¡su aroma no gusta a los piojos!

2. «Para evitar piojos lo mejor es utilizar productos contra la pediculosis de manera preventiva». MENTIRA
Claro que no, ¿acaso tomamos un analgésico sin que nos duela nada? Pues no, entonces ¿por qué utilizar un champú contra la pediculosis si el niño no tiene piojos? Usar estos productos de manera cotidiana y habitual puede generar resistencias y si el día de mañana el niño pilla liendres, ¡no habrá quien las quite!
Mejor opta por productos naturales como el aceite de eucalipto o de lavanda para prevenir el contagio y sobre todo, no dejes que tus hijos compartan gorros ni peines.
3. «Los piojos vuelan de una cabeza a la otra». MENTIRA
Al contrario de lo que se cree, estos insectos no vuelan… ni tampoco saltan de una cabeza a la otra. Entonces, ¿cómo se produce el contagio? Muy fácil: los piojos se cogen de los cabellos, por lo tanto si un niño con pediculosis y uno sin juegan muy juntitos, con las cabezas una al lado de la otra, estos insectos aprovecharán la situación para pasar cogidos del pelo de un peque a otro.
¿Hay más formas de contagio? Claro: compartir peines, gorros, coletas, ropa, toallas e incluso un peluche puede producir el contagio. ¿Y si un niño sin piojos duerme donde antes ha dormido uno con pediculosis? También es posible que los pille.
A mi hijal a baño con shampoo y enjuague de hievas, al peinarla julio un gel antipiojos y al final le coloco una mezcla de aceite de romero con hierva buena