Todavía recuerdo la primera vez que me hablaron de la matronatación. Me quedé de piedra. Para mí, la natación siempre fue un deporte para niños o adultos, nunca para bebés pero… comencé a investigar y descubrí los beneficios de la natación para bebés.
Así fue como a los 9 meses de mi hijo nos embarcamos en la aventura de nuestro primer curso de matronación. Hoy te invito a descubrir los beneficios de la matronatación…
¿Qué es la matronatación?
La matronatación, también conocida como natación para bebés, es una estimulación acuática a través de juegos y actividades lúdicas. Casi sin darse cuenta, el bebé comienza a relacionarse con el medio acuático y a reforzar el vínculo afectivo con su acompañante, sea la mamá o el papá.
Matronación: ¿a partir de qué edad?
Por lo general, los cursos de matronatación inician a los 6 meses del bebé pero existen algunos lugares donde es posible encontrar clases para bebés más pequeños. De hecho, en el último sitio donde estuvimos, daban clases para bebés de un par de meses en adelante, divididos en grupos etarios.
Antes de anotar a tu hijo en clases de matronatación, consulta con tu médico pediatra. Él mejor que nadie te orientará al respecto y te sabrá decir si el sistema inmunológico de tu hijo está preparado para ello o no.
Si tu hijo padece alergias, recuerda que es importante no sólo consultar al médico, sino averiguar si la piscina es de ozono o utiliza cloro y otros productos que pueden ser irritantes para su piel.

¿Cómo es una clase de matronatación?
Las clases de matronatación varían según la edad de los peques y duran entre 30 y 45 minutos. En un primer momento, se trata de un acercamiento al agua, donde lo importante es realizar trabajos con el pequeño dentro del agua, como coger pelotas, abrazar a mamá o a papá, chapotear…
Con el tiempo y la madurez de los peques, los monitores irán introduciendo ejercicios más complejos como cogerse al bordillo por sí solos, saltar desde el bordillo, desplazarse con churros, sumergirse…
El fin último de llevar a los peques a matronatación no debe ser que salgan nadando (al menos no cuando son tan pequeños) sino que aprendan a relacionarse con el agua y a no tenerle miedo.
Beneficios de la matronatación
Los beneficios de la natación para bebés son múltiples:
- ayuda al desarrollo psicomotor: los bebés que aún no caminan encuentran en la piscina un espacio donde pueden moverse más libremente y comienzan a ejercitar sus extremidades y todos los músculos de su cuerpo.
- el sistema cardiorespiratorio se fortalece: el trabajo que se realiza en el agua ayuda a mejorar la eficiencia de la oxigenación.
- ayuda al sistema inmunológico
- fortalece la relación afectiva y cognitiva bebé-mamá-papá: hacer natación juntos ayuda a conocerse y a confiar el uno en el otro.
- comienza la socialización: aún en bebés muy pequeños, el estar en contacto con otros bebés inicia el proceso de socialización. En bebés mayorcitos, los juegos en el agua pueden ayudarlo a ganar confianza y a comunicarse tanto con sus compañeros como con los monitores.
- ayuda al bebé a relajarse y a conciliar el sueño
- ayuda al bebé a sentirse más seguro
- desarrolla el instinto de supervivencia: así, los peques que hacen matronatación aprenden a girarse sobre sí mismos. cerrar la boca y flotar aunque sea unos instantes frente a una caída al agua.
Si estás pensando en anotar a tu hijo en matronatación, te aseguro que no te arrepentirás: ¡es una experiencia magnífica!
Mi enano va desde que tiene 8 meses y se lo pasa bomba en las clases de natación, yo estoy súper contenta porque su soltura en el agua es inmensa y cada día avanza más y además el vínculo que creamos con nuestros hijos es muy grande.
Yo recomiendo las clases a todas las mamá o papá que están pensando en dar esas clases con sus bebé.