En invierno, ir al parque puede ser misión imposible. Entre la lluvia, el frío y los días más cortos, son muchas las tardes que terminamos en casa con los niños por eso hoy te proponemos 4 juegos para niños de 2 años.
¿Los vemos?
Estos juegos fomentan el aprendizaje de los niños a la vez que ¡los entretienen! Si quieres comenzar a enseñarle a tu hijo los colores, fomentar su creatividad e imaginación y ayudarle a mejorar su motricidad gruesa y fina, ¡continúa leyendo!
4 juegos para niños de 2 años
1. Un juego para la motricidad fina y aprender los colores

Pega hojas de celofán de diferentes colores en una ventana que esté a la altura de tu hijo (preferentemente la ventana del balcón o el jardín, así no debe subirse a una silla para jugar). Dale hojas de papel de los mismos colores que los celofanes que pegaste en la ventana y déjalo cortar con sus dedos o con una tijera para niños. Luego, incítalo a pegar los pedacitos sobre el celofán del mismo color y repítele el nombre del mismo. ¡Un juego divertido y educativo!
2. Pintar piedras y crear ¡competencias de coches!

Este es uno de los juegos para niños de 2 años que más nos ha gustado porque ¡es súper completo! Primero, lleva a tu hijo a recolectar piedras. Ya en casa, die que imagine qué puede ser cada piedra según su forma y luego ¡a pintar! Si tu hijo aún se mete las manos en la boca, utiliza nuestra receta de pintura comestible.
Cuando tengáis todas las rocas pintadas, ¡llegó la hora de la competencia! Lo mejor es que es posible jugar en casa, en el parque o en la playa. ¿Conoces el Dakar? Puedes varias los escenarios como en esta famosa competencia. ¿Quién ganará?
3. Jardín sensorial para niños

Nuestros amigos de Pequeocio proponen hacer un jardín sensorial en casa. Lo bueno de esta idea es que es tan divertida que sirve para peques y niños mayores… En el caso de niños muy pequeños, recuerda que pueden jugar con el jardín sensorial siempre bajo supervisión.
Entra aquí para descubrir cómo crear tu jardín sensorial.
4. Un juego que pone a prueba la imaginación

Coge todos los trozos de fieltro que tengas dando vuelta por casa, recorta diferentes figuras y ¡deja que los peques pongan a prueba su imaginación! En la imagen puedes ver cómo con las figuras han recreado el hábitat de los animales de la selva. También puedes recortar narices, ojos, caras, orejas y todo lo necesario para crear monstruos y creaturas fantásticas… ¿Te gusta la idea?